Una delegación internacional viajará en la región brasileña de MATOPIBA para documentar el impacto social, económico, medioambiental y de derechos humanos de la adquisición de tierras a gran escala. Esta semana, un grupo de 30 expertos en derechos humano y desarrollo rural iniciarán una misión de investigación (MI) en el noreste de Brasil. La misión, motivada por la evidencia de violaciones de derechos humanos y destrucción medioambiental, documentará y analizará el impacto estructural de la adquisición de tierras a gran escala y pondrá el foco sobre la trama del negocio de tierras en la región. Acaparamiento de tierras, un fenómeno que se ha convertido en habitual Desde que comenzara la crisis multidimensional de 2008, el fenómeno del acaparamiento de tierras se ha multiplicado rápida y profundamente en todo el mundo. Con ello se ha detectado un aumento del movimiento de capitales de los estados y las compañías en las áreas rurales, acompañado de violentas expropiaciones de poblaciones tradicionales de sus tierras, causando asimismo devastación medioambiental y un gran impacto social. Brasil, cubierto de bosques frondosos y selva, se ha convertido en el blanco de los inversores del negocio de tierras, quienes han visto cómo sus beneficios aumentaban hasta un 400% gracias a la expansión de las industrias agrarias de productos básicos como la soja, el azúcar, el maíz, el algodón, el eucalipto y carne. MATOPIBA, un término que hace referencia a la región del noreste de Brasil en el estado de Tocantins y a los estados vecinos de Maranhão, Piauí y Bahía, es un ejemplo paradigmático de la expropiación de tierras. La deforestación y su consecuente desarrollo de fincas tiene un coste muy reducido para los inversores, al mismo tiempo que produce grandes beneficios, lo que ha puesto a esta región en el punto de mira. Los casos de expropiación en la región a menudo se llevan a cabo con la adquisición de tierras públicas de conocidos acaparadores locales por fondos de pensiones internacionales, a través de sociedades inmobiliarias brasileñas. Estas últimas, en realidad, son empresas transnacionales que han sido específicamente creadas para tal propósito. El coste humano del acaparamiento de tierras Las zonas limítrofes son el hogar de campesinos y camepsinas, pueblos indígenas, descendientes de esclavos huidos y otras poblaciones tradicionales. Las masivas y violentas expulsiones que comenzaron en la primera década del siglo XIX obligaron a las comunidades tradicionales a movilizarse hacia áreas colindantes, donde existe escasez de recursos naturales y que son insuficientes para la supervivencia y manutención. Aquellos y aquellas que se marcharon de manera permanente y emigraron a las ciudades viven habitualmente en barrios marginales de la periferia de las grandes metrópolis, donde tratan de sobrevivir con trabajos precarios o ilegales. Otros, que consiguieron quedarse, si aún no han sido expulsados de manera violenta, pueden únicamente sobrevivir trabajando en condiciones de riesgo, cercanas a la esclavitud, paras el mismo agronegocio que ocupósus tierras. Al mismo tiempo, la deforestación y sobrexplotación de las tierras y otros recursos naturales está provocando la destrucción de la biodiversidad de la región. La misión Durante la MI, los participantes visitarán comunidades emblemáticas para documentar y analizar el impacto estructural del acaparamiento de tierras, desde la perspectiva de los derechos humanos. La misión también examinará las obligaciones del estado brasileño e identificará las obligaciones extraterritoriales concretas en materia de derechos humanos de los estados donde las compañías forman parte de la gran red del negocio de las tierras. La misión está organizada por FIAN Internacional y contará con la participación de: Action Aid International y Brazil; Aidenvironment; Cáritas Regional do Piauí; Comissão Pastoral da Terra Nacional y Piaui; Escola de Formação Paulo de Tarso (EFPT - PI); Federação dos Agricultores Familiares (FAF); Federação dos Trabalhadores Rurais na Agricultura (FETAG-PI); HEKS/EPER International Institute of Social Studies; La Via Campesina International y CLOC- La Via Campesina, GRAIN, Maryknoll, Paróquia de Santa Filomena, Instituto Comradio do Brasil; Rede Social de Justiça e Direitos Humanos; Sindicato dos Trabalhadores Rurais de Santa Filomena; Vara e Procuradoria Agrária - PI, PROGEIA (Santa Filomena), así como las secciones de FIAN Internacional en Alemania, Holanda y Suecia. El 14 de septiembre tendrá lugar una conferencia en Brasilia, seguida de una audiencia pública con las autoridades brasileñas. Para cualquier consulta, por favor contactar con [email protected] y/o [email protected] Sigue las informaciones en las redes sociales en #BrazilLandGrab y #CaravanaMatopiba