Biodiversidad - Jul 2010

Veinte años de lucha

Un vigésimo aniversario invita a la reflexión: acerca de nuestros orígenes, acerca de nuestra trayectoria, acerca de los desafíos a enfrentar. Sin pretender un análisis a fondo, presentamos a continuación algunas reflexiones. Para ello conversamos con varias personas que nos han acompañado en estos años y les pedimos sus puntos de vista sobre la lucha por lograr un mejor sistema alimentario y un mundo mejor.
Un vigésimo aniversario invita a la reflexión: acerca de nuestros orígenes, acerca de nuestra trayectoria, acerca de los desafíos a enfrentar. Sin pretender un análisis a fondo, presentamos a continuación algunas reflexiones. Para ello conversamos con varias personas que nos han acompañado en estos años y les pedimos sus puntos de vista sobre la lucha por lograr un mejor sistema alimentario y un mundo mejor.

Las leyes de semillas aniquilan la soberanía y autonomía alimentaria de los pueblos

Colombia - Desde los orígenes de la agricultura, las semillas son un componente fundamental de la cultura, los sistemas productivos, la soberanía y la autonomía alimentaria de los pueblos. Las semillas son el resultado del trabajo colectivo y acumulado de cientos de generaciones de agricultores, que las han domesticado, conservado, criado, utilizado e intercambiado desde épocas ancestrales. Multiples grupos humanos en diferentes regiones han mejorado y adaptado variedades a un amplio rango de ambientes, condiciones climáticas, sanitarias, de suelos, y a requerimientos culturales, productivos y socioculturales. Es fundamental que las semillas caminen libremente de la mano de los campesinos sin un dueño definido, porque son patrimonio colectivo de todos los pueblos. Por ello, para los pueblos y las comunidades locales es inaceptable que cualquier forma de vida y específicamente las semillas, pueda ser controlada monopólicamente mediante patentes o protección de obtentores vegetales.
Colombia - Desde los orígenes de la agricultura, las semillas son un componente fundamental de la cultura, los sistemas productivos, la soberanía y la autonomía alimentaria de los pueblos. Las semillas son el resultado del trabajo colectivo y acumulado de cientos de generaciones de agricultores, que las han domesticado, conservado, criado, utilizado e intercambiado desde épocas ancestrales. Multiples grupos humanos en diferentes regiones han mejorado y adaptado variedades a un amplio rango de ambientes, condiciones climáticas, sanitarias, de suelos, y a requerimientos culturales, productivos y socioculturales. Es fundamental que las semillas caminen libremente de la mano de los campesinos sin un dueño definido, porque son patrimonio colectivo de todos los pueblos. Por ello, para los pueblos y las comunidades locales es inaceptable que cualquier forma de vida y específicamente las semillas, pueda ser controlada monopólicamente mediante patentes o protección de obtentores vegetales.

El Banco Mundial en el banquillo

Los principios del BM intentan distraer del hecho de que la crisis alimentaria global —cuya cifra récord es más de mil millones de personas que sufren hambre— no será resuelta por la agricultura industrial a gran escala que aplicarán los inversionistas que están adquiriendo tierra.
Los principios del BM intentan distraer del hecho de que la crisis alimentaria global —cuya cifra récord es más de mil millones de personas que sufren hambre— no será resuelta por la agricultura industrial a gran escala que aplicarán los inversionistas que están adquiriendo tierra.

Se acerca el Quinto - Congreso de la CLOC

Quince años después de la fundación de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC)-Vía Campesina, esta enorme red de organizaciones se apresta a celebrar su quinto congreso en Quito, Ecuador entre el 8 y el 16 de octubre de este año, precedido por la 4a Asamblea de Mujeres y la 3a Asamblea de Jóvenes
Quince años después de la fundación de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC)-Vía Campesina, esta enorme red de organizaciones se apresta a celebrar su quinto congreso en Quito, Ecuador entre el 8 y el 16 de octubre de este año, precedido por la 4a Asamblea de Mujeres y la 3a Asamblea de Jóvenes

Agricultura y soberanía alimentaria

Entre el 19 y el 22 de abril del 2010 y en el contexto de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra, más de quinientas personas provenientes de diferentes partes del mundo debatimos y construimos consensos en el Grupo 17 (Agricultura y Soberanía Alimentaria) para profundizar el diagnóstico y formular propuestas de cómo enfrentar la crisis climática. La diversidad de experiencias, orígenes y culturas no nos impidió escucharnos y avanzar en la construcción colectiva. Este documento se enmarca en el Acuerdo de los Pueblos, documento final de la Conferencia en la que participaron más de 35 mil personas, que expresó con claridad: “Requerimos forjar un nuevo sistema que restablezca la armonía con la naturaleza y entre los seres humanos. Sólo puede haber equilibrio con la naturaleza si hay equidad entre los seres humanos. Planteamos a los pueblos del mundo la recuperación, revaloración y fortalecimiento de los conocimientos, sabidurías y prácticas ancestrales de los pueblos indígenas, afirmados en la vivencia y propuesta de Vivir Bien, reconociendo a la Madre Tierra como un ser vivo, con el cual tenemos una relación indivisible, interdependiente, complementaria y espiritual”. Compartimos las conclusiones finales del Grupo 17, un paso más en el camino de construcción que los pueblos emprenden en cada rincón del planeta donde la vida continúa fluyendo.
Entre el 19 y el 22 de abril del 2010 y en el contexto de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra, más de quinientas personas provenientes de diferentes partes del mundo debatimos y construimos consensos en el Grupo 17 (Agricultura y Soberanía Alimentaria) para profundizar el diagnóstico y formular propuestas de cómo enfrentar la crisis climática. La diversidad de experiencias, orígenes y culturas no nos impidió escucharnos y avanzar en la construcción colectiva. Este documento se enmarca en el Acuerdo de los Pueblos, documento final de la Conferencia en la que participaron más de 35 mil personas, que expresó con claridad: “Requerimos forjar un nuevo sistema que restablezca la armonía con la naturaleza y entre los seres humanos. Sólo puede haber equilibrio con la naturaleza si hay equidad entre los seres humanos. Planteamos a los pueblos del mundo la recuperación, revaloración y fortalecimiento de los conocimientos, sabidurías y prácticas ancestrales de los pueblos indígenas, afirmados en la vivencia y propuesta de Vivir Bien, reconociendo a la Madre Tierra como un ser vivo, con el cual tenemos una relación indivisible, interdependiente, complementaria y espiritual”. Compartimos las conclusiones finales del Grupo 17, un paso más en el camino de construcción que los pueblos emprenden en cada rincón del planeta donde la vida continúa fluyendo.

Todas las luchas están relacionadas

Presentamos ahora fragmentos de historias, experiencias y reflexiones sobre cómo han cambiado y crecen las luchas en pos de un destino propio en los últimos veinte años. Como siempre, juntamos palabra de muchos rincones, de los análisis personales y colectivos. Los juntamos para leerlos hilados porque, de por sí, todas las historias están relacionadas, como también las luchas.
Presentamos ahora fragmentos de historias, experiencias y reflexiones sobre cómo han cambiado y crecen las luchas en pos de un destino propio en los últimos veinte años. Como siempre, juntamos palabra de muchos rincones, de los análisis personales y colectivos. Los juntamos para leerlos hilados porque, de por sí, todas las historias están relacionadas, como también las luchas.

La Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo, CLOC, frente al cambio climático y los derechos de la Madre Tierra

La Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC) llevará a cabo su V Congreso Continental entre el 8 y el 16 de octubre de 2010, en Quito, Ecuador, precedido por la cuarta Asamblea de Mujeres y la tercera Asamblea de Jóvenes. De camino a este congreso, la CLOC ha desarrollado un conjunto de documentos de posición. El que aquí entregamos se refiere a las causas del cambio climático y a las acciones necesarias para que la agricultura campesina continúe haciendo sus aportes fundamentales a la alimentación y al enfriamiento del planeta. Esperamos que este cuadernillo contribuya a los debates en preparación al V Congreso.
La Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC) llevará a cabo su V Congreso Continental entre el 8 y el 16 de octubre de 2010, en Quito, Ecuador, precedido por la cuarta Asamblea de Mujeres y la tercera Asamblea de Jóvenes. De camino a este congreso, la CLOC ha desarrollado un conjunto de documentos de posición. El que aquí entregamos se refiere a las causas del cambio climático y a las acciones necesarias para que la agricultura campesina continúe haciendo sus aportes fundamentales a la alimentación y al enfriamiento del planeta. Esperamos que este cuadernillo contribuya a los debates en preparación al V Congreso.