La cuestionable estrategia de China y Vietnam para controlar la pandemia de los cerdos en Asia

Ésta es una actualización de informes anteriores que escribimos sobre la Peste Porcina Africana. Pueden revisar estos informes aquí (sólo en inglés), aquí y aquí.

En junio del año pasado, una vacuna pionera contra la Peste Porcina Africana (PPA), llamada NAVET-ASFVAC fue liberada comercialmente en Vietnam, llevando consigo una esperanza inmediata a los afligidos núcleos de producción de cerdos, que enfrentaban un desastre económico originado por el sacrificio del 20% del plantel nacional de cerdos.[1]

Siendo Vietnam el segundo productor de cerdos más grande de Asia, su ministro de agricultura, Phùng Đức Tiến, obviamente, se jactó ante los medios de que la vacuna era el resultado de una rigurosa investigación científica financiada por el gobierno, con apoyo de EUA. “La producción y calidad de la vacuna están aseguradas” señaló.[2]

Sin embargo, en los meses siguientes, veterinarios de los organismos públicos debieron trasladarse con urgencia a la provincia central de Phu Yen, en respuesta a informes de campesinos y campesinas que relataban que sus cerdos morían después de que se les aplicaba la nueva vacuna. El optimismo se desplomó. El aumento de mortalidad que siguió a la vacunación fue confirmado. Luego que murieron unos cuantos cientos de cerdos, el gobierno decidió suspender la vacunación.

Calificado como el brote más severo de enfermedad de cerdos de la historia reciente, a la fecha de julio de 2022, se había informado de la presencia de la PPA en 74 países en todo el mundo.[3] En Asia, antes de agosto de 2018 no se había registrado PPA. El brote de esta enfermedad se ha expandido ahora a 16 países de Asia a pesar del sacrificio de millones de cerdos por parte de las autoridades nacionales.[4]

El brote de PPA en Asia se remonta a agosto de 2018 cuando China informó su primer caso. Para contener la propagación de la enfermedad, China estableció pautas sobre la prevención y control de la PPA, declarando que “promovería la producción de cerdos a gran escala y reduciría el número de pequeñas granjas porcinas, como una forma de prevenir y controlar los brotes de PPA”.[5] Luego, el gobierno emitió una declaración en la que enfatizaba que entregaría un subsidio a la producción en granjas porcinas a gran escala en áreas fuertemente afectadas por la enfermedad.

Tal como prometió el gobierno, una larga lista de subsidios y préstamos para restablecer el abastecimiento de cerdos se entregó exclusivamente a las granjas de gran tamaño. Bajo la amenaza constante de la PPA, el gobierno lanzó un sistema de certificación de “zonas libres de PPA” para mantener canales comerciales abiertos para las granjas de cerdos pertenecientes a corporaciones.

Sin embargo, la evidencia que se ha recopilado durante los últimos tres años muestra que el desarrollo de granjas de cerdos más grandes y más centralizadas no ha detenido al virus. Por el contrario, este enfoque estaría facilitando la propagación de la PPA y dañando de manera seria las fuentes de sustento para las familias rurales de China.

Las estadísticas indican que China tenía 21 millones de granjas de cerdos en 2020, una caída masiva en relación a los 105 millones de granjas de cerdos que existían en el país hace dos décadas.[6] La disminución fue impulsada por las medidas ambientales que eliminaron millones de granjas de cerdos pequeñas que no podían cumplir con el nivel de exigencias. En la actualidad, como resultado de la estrategia del gobierno ante la PPA, la industria de cerdos está aún más centralizada y más industrializada.

Quienes producen cerdos pueden postular para certificar el cumplimiento de un conjunto de estándares de bioseguridad establecidos por el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales. Debido a los altos criterios de evaluación. Sin embargo, las granjas seleccionadas sólo pertenecen a grandes compañías.[7] Este mecanismo incluso es usado como una herramienta institucional para tomar medidas enérgicas contra productores y productoras de cerdos a pequeña escala. Desde que se publicó en febrero de 2016, 166 sellos de zonas libres de PPA han sido concedidos a grandes corporaciones.[8]

El establecimiento de las zonas libres de PPA se ha convertido en parte del programa gubernamental de incentivos por desempeño político, un programa que permite a los gobiernos locales presumir el cumplimiento de sus deberes y servicios.[9] Bajo este sistema, los funcionarios provinciales y de otros niveles locales son alentados a ofrecer una serie de ventajas a las granjas de corporaciones para aprobar la certificación de zonas libres de PPA, tales como el financiamiento a través de subsidios, arriendo de tierra ventajosos y descuentos en los cobros por vigilancia del virus. Las corporaciones con certificación de zona libre de PPA también pueden librarse de las fuertes restricciones al transporte de cerdos a través de zonas nacionales y extranjeras.

Una de las compañías que se benefició de las políticas de la PPA es Muyuan Food, una de las productoras de cerdos gigantes de China. Las utilidades de Muyuan Food crecieron en 1413% en los primeros nueve meses de 2020, llegando a los 3210 millones de dólares.[10] Estas utilidades aumentaron la capacidad de la compañía para expandir sus granjas de cerdos y ampliar sus medidas de bioseguridad y niveles de automatización. La expansión del negocio de Muyuan depende fuertemente de la digitalización, de sistemas de inteligencia artificial y de la infraestructura de las granjas. Esto le ha valido a la compañía un alto nivel de reconocimiento por parte del gobierno chino, que le ha concedido 23 zonas libres de PPA durante el año 2022 —más de 45% de todas las nuevas zonas libres de PPA concedidas.[11]

Las granjas de cerdo de corporaciones en China operan bajo dos modelos de negocio principales: el modelo integrado con uso intensivo de capital, como Muyuan Food y el modelo de contrato corporación-agricultor. La pandemia creó condiciones aún más favorables para el modelo integrado con uso intensivo de capital.

Cuando las autoridades chinas idearon las medidas para detener la propagación de la PPA, ignoraron el hecho de que casi todos los principales brotes comenzaron en las granjas industriales de gran tamaño, a pesar de que sus modernas instalaciones, supuestamente, tenían los mejores niveles de prevención de la enfermedad. Una de estas granjas, ubicada en la provincia nororiental de Heilongjiang, tenía 73 mil cerdos y es de propiedad conjunta de Heilongjian Asia-Europe Animal Husbandry Company y el fondo de inversiones danés, IFU.[15]

Irónicamente, como respuesta a la propagación incesante de PPA, en China, la producción tipo factoría se está “mejorando”. En agosto del 2022, entró en producción una nueva granja de cerdos de 26 pisos. La gigantesca explotación está ubicada en Ezhou, una ciudad en la provincia de Hubei en China Central, con una capacidad de faenar 1.2 millones de cerdos al año.[16] La compañía detrás de esta operación, Hubei Zhongxin Kaiwei Modern Farming, comenzó como un grupo de inversiones en cemento, pero cambió a la producción de cerdos cuando el sector de la construcción se contrajo debido al Covid. Un total de 4 mil millones de yuanes (580 millones de dólares) se invirtió en esta mega granja. Desde enero a marzo de 2022, Zhongxin Kaiwei presentó 10 solicitudes de patentes relacionadas con el tratamiento de aguas servidas de los animales, transporte de alimento animal y tecnologías de ventilación.[17]

De acuerdo con Big Herdsman Co., un contratista de construcción de instalaciones ganaderas ubicado en Tsingdao, el número de granjas de cerdos de varios pisos ha aumentado a una tasa anual de 30% desde 2020.[18] La propia compañía ha participado en más de 200 proyectos de edificios de varios pisos para cerdas madres desde 2019. Se dice que este auge es el resultado de las recientes políticas sobre PPA y a una política agrícola del año 2019, que oficialmente autorizó la producción de ganado en edificios de varios pisos.[19]

Debido a que la PPA tiene una tasa de letalidad cercana al 100%, encontrar una vacuna parece ser una estrategia importante y obvia para controlar los brotes. En junio de 2022, Vietnam —que ha sacrificado más de 6 millones de cerdos y ha tenido pérdidas por sobre los 1290 millones de dólares debido al virus porcino— lanzó la primera vacuna de PPA a nivel mundial. En proceso de desarrollo desde noviembre de 2019, la vacuna, conocida como NAVE-ASFVAC, es controlada por la compañía vietnamita Navetco Company, propiedad del Ministerio de Agricultura de Vietnam, en sociedad con el Servicio de Investigación Agrícola de los Estados Unidos (ARS por sus siglas en inglés). Su seguridad y eficacia fue confirmada por el ARS del Departamento de Agricultura de los EUA.

No obstante, sólo tres meses después de su lanzamiento la vacuna fue retirada. Se encontraron muertos setecientos cincuenta cerdos en varias granjas de la provincia central de Phu Yen después de ser haber sido inyectados con la vacuna.[20] Aunque el vocero del ARS declaró que la muerte de los cerdos fue causada por procesos de vacunación que no cumplieron con las pautas del ministerio, el ensayo de la vacuna fue suspendido.[21] No obstante esto, un total de 23344 vacunas ya habían sido distribuidas entre julio y agosto de 2022.[22] Se sospecha que algunas vacunas se vendieron ilegalmente a China.

Esto fue una gran derrota para Vietnam, ya que esperaba fortalecer su posición en el mapa mundial de las vacunas. El gobierno está interesado en exportar vacunas PPA a otros países de Asia como las Filipinas y China, donde la producción y consumo de cerdos se ubica entre las más altas del mundo. “Muchas compañías chinas están interesadas en ordenar partidas de vacunas”, señaló Tiên, el viceministro de agricultura y desarrollo rural.

Además de Navetco, al menos otras dos compañías de Vietnam buscan liderar la exportación de vacunas PPA. Tanto la firma agrícola Dabaco Group JSC como el productor de vacunas para ganado, AVAC Vietnam Co., iniciaron sus ensayos y evaluación de vacunas en marzo de 2022. Una vez que lleguen a la etapa del registro legal, las vacunas podrían obtener pronto, durante este año, una licencia en Vietnam.[24]

En diciembre de 2022, AVAC Vietnam firmó un acuerdo de asociación con la compañía filipina KPP Powers Commodities para la distribución de la vacuna PPA. Bajo este acuerdo, KPP Powers fue designado como el distribuidor exclusivo en las Filipinas de la vacuna ASF Live Vaccine de AVAC, el cual es el único producto de este tipo y cuenta con autorización del gobierno para su exportación y un certificado de registro del producto, debidamente aprobado por Vietnam.[25]

Sin embargo, el uso generalizado de estos productos parece bastante más complicado. Incluso si se prueba que una posible vacuna PPA es efectiva, aún hay un largo camino que recorrer antes de aplicarla ampliamente en los países afectados. Un obstáculo importante es que los países como Vietnam tienen un alto interés en expandir las exportaciones de cerdos y no quieren poner en peligro su capacidad para exportar cerdos, dado lo difícil que es diferenciar a los cerdos vacunados de los cerdos enfermos.[26]

Con el objetivo de desbloquear las oportunidades de exportación, el Ministerio de Agricultura de Vietnam firmó en diciembre de 2021 un memorando de entendimiento (MDE) con la Corporación Financiera Internacional (IFC por sus siglas en inglés). La IFC, la rama del sector privado del Banco Mundial, ofreció apoyo técnico para el control de la PPA en Asia a través de su Proyecto de Asesoramiento.

El memorando exige que Vietnam lleve a cabo un programa de compartimentalización para apoyar el acceso al mercado de sus cerdos vivos y sus exportaciones de carne de cerdo. El programa entrega instrucciones a las firmas del sector privado para implementar un tipo de manejo estandarizado de los riesgos de bioseguridad. De manera similar a las zonas libres de PPA de China, la compartimentalización sólo beneficiará las corporaciones industriales productoras de cerdo, ya que privilegia los canales comerciales para las exportaciones de carne de cerdo por parte de las corporaciones.

En Vietnam, tres compañías participarán en este prototipo. De Heus, Hoa Phat y Masan Meatlife impulsarán el desarrollo y la operacionalización de buenas prácticas de producción y estándares de procesamiento basados en estándares internacionales de la Organización Mundial de Sanidad Animal. Las corporaciones entonces afirmarán cumplir con las normas y se beneficiarán de las cadenas de abastecimientos bio-aseguradas para la exportación de cerdos vivos o carne de cerdo.

Hay una cantidad creciente de evidencias acerca de que los ingredientes de alimento animal contaminados representan un alto riesgo de transmisión del virus de PPA a nivel nacional y global, pero importantes agencias gubernamentales e intergubernamentales, incluyendo a FAO y OMSA, continúan centrándose en impedir que campesinas y campesinos usen desechos de alimentos como alimento animal y promueven el uso de alimento animal comercial para reducir los riesgos de PPA.

China —un proveedor a nivel mundial de ingredientes claves y de uso diario en la industria del alimento animal— hace un tiempo prohibió el uso de plasma sanguíneo en el alimento animal, porque encontró que éste representaba un gran riesgo de transmisión. Sin embargo, los mataderos necesitaban un mercado para su sangre y, por lo tanto, iniciaron el cabildeo con los gobiernos, llevando al gobierno chino a flexibilizar la prohibición y permitir la venta de alimento animal que contiene plasma sanguíneo con la condición de que las pruebas de detección de PPA sean negativas.[28]

La centralización de la producción de cerdos en China no disminuye y otros países, grandes productores de carne de cerdo en Asia, están siguiendo el mismo camino, como Tailandia y Vietnam. Esta proliferación de granjas de producción intensiva de cerdos ya está generando una trama de efectos nocivos en las comunidades rurales de Asia. En la provincia de Dong Nai, al sur de Vietnam, la comunidad local está sufriendo por la contaminación producida por los depósitos de desechos a cielo abierto de las granjas industriales de cerdos que hay en su aldea. Algunos campesinos incluso han tenido que abandonar la crianza de gusano de seda debido al pérdida del cultivo que los alimenta, debido a los fuertes agroquímicos que llegan desde las granjas de cerdos.[29]

Una expansión de las mega granjas industriales y con tecnología de punta sólo continuará diezmando a los pequeños productores en una región que tiene una larga historia de producción a pequeña escala y descentralizada —ignorando completamente el ya demostrado vínculo entre este modelo y los brotes de PPA.[30] Si las autoridades nacionales e internacionales no cambian de dirección rápidamente, exacerbarán los riesgos de PPA y otras pandemias del ganado y dañarán de manera severa el sistema alimentario y el sustento de las comunidades rurales.