Campesinas, campesinos y la gente que produce alimentos en pequeña escala en el mundo entero sufrieron grandes problemas el año pasado: eventos climáticos como las inundaciones que devastaron los cultivos en Pakistán y la llamada crisis energética y alimentaria que causó grandes aumentos en los precios de los insumos al mismo tiempo que las empresas de fertilizantes y pesticidas se embolsaban inmensas ganancias.GRAIN produjo documentos de análisis que dejan al desnudo las fuerzas que le dan forma al sistema alimentario mundial y que permiten comprender estas fuerzas de mejor manera. Publicamos informes datos sobre la digitalización de la tierra, los tratados de libre comercio, mecanismos de lavado de imagen, los actores financieros que presionan por la expansión de la agricultura y la acuicultura industriales, promueven los organismos transgénicos, la trampa de los fertilizantes y mucho más.También trabajamos con nuestras contrapartes en todo el mudo para resistir la privatización de las semillas, las falsas soluciones que propone la Mesa Redonda sobre el Aceite de Palma Sustentable y el poder de las corporaciones en el sistema alimentario —y por una soberanía alimentaria, una justicia climática y una agroecología feministas.En nuestro informe sobre lo más destacado, reflexionamos sobre estas y otras actividades durante lo que para nosotros fue un año con tristezas y alegrías, con varias pérdidas y nuevos comienzos.Bajar el informe